domingo, 13 de mayo de 2012

TELEPORTACION O VIAJE INSTANTANEO



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No se si me estaré adelantando en mi época en esta cuestión,pero ahí va:
Este sueño se podría materializar si se ponen manos a la obra un equipo multidisciplinar.Gracias a las leyes sorprendentes de la física cuántica se puede "teletransportar" tanto una partícula subatómica como cualquier otro cuerpo.Por ejemplo,un fotón (esto lo explico en el proyecto dossier).Una de las características físicas de un fotón. su polarización (un fotón es una partícula de luz.Su polarización presenta una disemetría en relación a su dirección de propagación).


Esta disemetría puede adquirir varios valores,y transmitirla a otro fotón situado a una determinada distancia.Por supuesto no se trata de una simple reproducción,como la que realiza una fotocvopia,puesto que si se generaliza el procedimiento a todos los parámetros de dicha partícula fotónica,es decir,su energía,frecuencia,,amplitud de onda,espectro cromático,etc,y si se extiende a todas las partícuñlas que componen un objeto,provocará su desmaterialización para volver a aparecer en otra parte.¿Como se consigue esto?,bien,un fotón se caracteriza por una serie de parámetros (posición espacial,energía,polarización,etc) que definen su "estado cuántico",Según el -principio de incertidumbre-.es imposible conocer perfectamente el estado de una partícula.


Este fenómeno no se debe a una impresición en los aparatos de medición,sino a una característica de la fenomenología cuántica.Incluso el -principio de incertidumbre va incluso más allá.Cada parámetro de una partícula,especialmente su posición espacial,es indeterminada antes de ser observada (tengamos en cuenta que un electrón gira en torno a su núcleo de planos diferentes en cada giro,provocando un "salto cuántico").Así antes de su mediciín,un fotón puede encontrarse simultáneamente en dos lugares (posiciones),aunque una sea virtual y la otra real ("vínculo fantasma").La indeterminación vale para todos los parámetros.En cambio,cuando un detector señala la presencia de la partícula en el punto "alfa" ( es decir,cuando se la ha "medido"),ésta pasa simultáneamente del estado cuántico (la partícula está a la vez en "alfa" y en "beta") al estado no cuántico (la partícula está solamenter en "alfa").Toda perturbación (como una medición) destruye el frágil estado de indeterminación cuántica).


Referente a un "vínculo fantasma" que permite acoplar fotones a distancia,hay que decir que,teleportar el estado de polarización de un fotón significa transmitir la polarización del fotón alfa al fotón beta,prescindiendo de su valor,es decir de su disemetría.Pero la dificultad está en ¿como lograrlo sin aniquilar la "nube" o vaporosidad cuántica?Precisamente a un "vínculo fantasma" que permite la acoplación de fotones a distancia.Efectivamente,dos fotones acoplados están unidos por un vínculo cuántico cuya naturaleza se escapa al sentido de la lógica/razón.


Por ejemplo,se puede crear dos fotones acoplados cuyas polaridades (polarizaciones),aunque claro está,indeterminadas,son siempre inversas (ánodo al cátodo),cualquiera que sea la distancia que las separe.Sin embargo,el vínculo queda destruido cuando se efectúa una medición.Cuando Einstein denominaba al fenómeno "•acción fantasma a distancia",recibió por parte de la comunidad científica una brillante corraboración.Aunque no permite transmitir informaciones a distancia de manera instantánea,a causa de la confirmación que el principio según el cual ninguna información puede circular o transitar a velocidad superior a la de la luz (aunque los alienígenas tengan el modo de hacerlo),este vínculo garantiza la simultanedad de las reacciones de dos fotones distanciados.El secreto de la teleporatación estriba en esa extraña acción a distancia.

Pongamos un ejemplo práctico: supongamos que Z quiere "teleportar" un fotón alfa a H.Lo primero que debe hacer es crear dos fotones acoplados B y C,y luego dar uno (por ejemplo el C) a Z,que se lo lleva a su casilla.La correalción obliga a los fotones B y C (beta y ganma) a tener constantemwente polaridades inversas.Así pués,Z posee uno de los dos fotones acoplados (el virtual beta) y el fotón alfa que quiere teloeportar.Por su parte,H posee el segundo fotón acoplado (el virtual ganma).Ninguno de los tres fotones tiene una polarización determinada.Sólo se sabe que las polarizaciones de beta y de ganma son inversas.Cuando Z decide realizar la teleportación de alfa,le basta con emparejarlo a beta.Para conseguirlo,mide la polaridad del conjunto alfa+beta.

Esta medición tiene tres consecuencias: en primer lugar,se pierde la nube o vaporosidad cuántica de los dos fotones de Z (alfa+beta).El estado del ganama de H adquiere instantáneamente una polarización determinada por la medición de alfa+beta.Por último,Z posee un resultado tipológico de "la polarización del conjunto alfa+beta equivale a X".A continuación se trata de dar al fotón ganma el estado del fotón alfa previo a la medición.Ahora,Z ya sólo tiene que comunicar a H el resultado de su medición de alfa+beta.Entonces H procederá a la manipulación inversa a la que Z por operación de simetría,en el caso de la polarización.


Para dar al fotón ganam las características -indefinidas- que tuvo el fotón alfa.Finalmente,H se encuentra con un fotón de características iguales a las del fotón alfa de origen.La operación de teleportación ha terminado.Pero aquí estamos hablando del mundo microfísico,¿y en cuanto a la teleportación del ser humano,que?.Es una pregunta muy compleja,puesto que teleportar,además del significado etimológico de "llevar a distancia",tambien significa recopiar a ciegas informaciones características de una partícula elemental a otra,situada lejos de la primera.


Primera cuestión a tener en cuenta: ¿cual es la cantidad de información necesaria para la "creación" o,mejor dicho,la "construcción" de un ser humano?.Según los últimos estudios,un cuerpo contiene unos 10 átomos elevado a la 28 potencia.Según su naturaleza (carbono,hierro,oxígeno,hidrógeno,potasio...) un átomo está constituido de un monton de partículas subatómicas elementales (electrones y quarks).caracterizadas ellas mismas por multitud de parámetros de estado.La obtención y transmisión de informaciones referentes a este conjunto de partículas puede llegar a ser problemático.


Para facilitar los cálculos,supongamos que,en un futuro ya sea cercano o lejano,la teleportación se aplique no a un fotón sino a un átomo entero.La pregunta pertinente sería,¿que número de informaciones se deberá transmitir a un ser humano para su teleportación?.Sin duda la suma sería colosal.Fijaos que cada átomo del cuerpo se caracteriza por su posición espacial,su velocidad y dirección,su vibración específica,por el número de ptotones que contenga un determinado átomo así como de los neutrones y electrones que contenga,por su nivel de energía,etc.Según cálculos estimativos,la descripción de un átomo ocuparía el equivalente,como mínimo,de una cuartilla,es decir, un kilo-octeto de información.El conjunto de átomos en un cuerpo necesitaría 10 elevado a la 28 potencia de kilo-octetos de información,información muy superior a 10 millones de bibliotecas de Alejandría,o a la de todos los libros escritos desde que se inventó la escritura,miles y miles de años.

Si esto fuera factible (que lo es,si se construye un superordenador a base de titanio cristalizado (o varios) como el del proyecto dossier),¿como se transmitiría esta información? Lo más lógico sería,a la par que más rápido,almacenarla en discos duros de cristal de titanio enriquecido de ordenador,y luego enviarla a su destino,por ejemplo vía internet.Un disco duro standard de alta capacidad (vosotros bien lo sabeis) puede almacenar 10 giga-octetos (10 millones de kilo-octetos).Dadas las dimensiones físicas de un disco duro (más o menos,10 cm de espesor),su almacenamiento (amontonados unos encima y al lado de otros) alacanzaría una altura de ¡10.000 años luz!,es decir,un tercio de la distancia que separa la Tierra del centro de la galaxia (unos 30.000 años luz).


A razón de 100 mega-octetos por segundo,la introducción de las informaciones en los discos duros reuqeriría el equivalente a 1.500 veces la edad del Universo (nuestro universo local,se entiende,unos 15.000 millones de años),y otro tanto para leer las informaciones.En definitiva,teleportar un ser humano por procedimientos convencionales,por muy avanzados que estos sean,exigiría una duración y medios que sobrepasan con mucho las capacidades humanas (pero no con las nanotecnologías).En cuanto a la energía necesaria para obtener las informaciones,basándonos siempre en procedimientos convencionales,exigiría la energía de más de mil bombas de hidrógeno de un megatón cada una.Al parecer,por procedimientos standar,la teleportación


de los seres humanos e,incluso la de pequeños objetos,será casi irrealizable si no se aplican las nanotecnologías u otras fuentes de características extraterrestres.


Núnca se puede decir que esto es imposible,pues se inscribe en el mundo realista de la comunicación cuántica.En un futuro (con la tecnología adecuada) podremos servirnos de esta neotecnología para traferir informaciones a un ordenador cuántico con componentes neurocibernéticos o,en criptografía cuántica,para transmitir a un comunicante la clave de un texto,expediente o dossier secreto.Así pues,su interes es capital en la era del ciberespacio.





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