martes, 28 de diciembre de 2010

LA ALINEACIÓN PLANETARIA

realizado al menos en los últimos 6,000 años.
la alineación planetaria puede hacer sumamente peligrosa ya que será como un brazo potencial gravitatorio debido a la teoría de la descarga del plasma eléctrico de la gravedad de la alineación, que pudiera acercar peligrosamente cualquier cometa o meteoro a las órbitas lunar o Terrestre.
A continuación transcribo una información que llego a mis manos respecto a dicha alineación y cuyo autor es anónimo pero creo que es interesante y las hipótesis y teorías que se manejan no están fuera de la realidad:
AUTOR ANÓNIMO
ENORMES MAREMOTOS
Cuando aun no tenemos la certeza acerca de las consecuencias del impredecible Efecto 2000, una nueva sombra quizá más amenazadora, planea sobre el horizonte. Se trata del alineamiento planetario que tendrá lugar el 5 de Mayo del año 2000. Para hacernos una idea de las posibles repercusiones de este fenómeno, basta subrayar que importantes compañías aseguradoras ya tienen en cuenta dicha eventualidad a la hora de establecer sus pólizas. Pero, además, algunos investigadores sugieren que la magnitud de los efectos de dicha alineación, entre los que podemos citar terremotos, erupciones volcánicas e el deslizamiento de los polos, puede alcanzar cotas apocalípticas.
A medida que van conociéndose las posibles repercusiones económicas del virus del milenio, las compañías de seguros afinan su coberturas para no verse desbordadas por los múltiples per previsibles efectos indeseados. Su preocupación no decrece pese alas evaluaciones aproximadas acerca del Efecto 2000, y ahora planea sobre le horizonte un nuevo acontecimiento que podría igualarle en siniestralidad. Se trata de la alineación planetaria que se espera para el 5 de mayo del 2000. En este sentido, varias empresas británicas del ramo de seguros has contratado a un experto en evaluación de riesgos el doctor Julián Salt, para examinar la situación. Dos periódicos, uno de Australia y otro de Nueva Zelanda, publicaron un reportaje en el que Salt Advirtió:
"El día 5 de Mayo del 2000, seis planetas van a situarse formando una línea recta por primera vez en 6,000 años. Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno y la Tierra se alinearan con el Sol y la Luna. La consiguiente fuerza de gravedad, muy intensa, puede provocar terremotos y repercutir en la actividad volcánica".
Salt también explico que la fuerza gravitacional de todos estos planetas superara la ejercida normalmente por la Luna y puso el ejemplo de Júpiter, cuya masa es unas 318 veces mayor que la de la tierra. El experto cree que podrían haber maremotos de hasta 1,400 m. de altura y que la fuerza de arrastre desde el espacio podría liberar el calor y energía del núcleo de la Tierra mediante la actividad volcánica y los terremotos. Las erupciones podrían arruinar a varios países y cambiar sus climas finalmente el experto británico concluyo recordando que la última alineación planetaria de estas características se di en 4,000 A. C. y la evidencia geológica de la época habla de catástrofes y cataclismos como los que estamos citando.
En esta línea de preocupación se manifiesta también el escritor Richard Noone, autor del libro "5/5/2000 Hielo: El Ultimo Desastre". En sus paginas plantea una serie de preguntas a las que urge buscar respuestas e indaga acerca del interés del lector por saber como las estrellas pueden afectar su vida y sobre la veracidad del algún precedente histórico que avale las predicciones para el próximo mes de Mayo del 2,000, la Tierra y la Luna estarán a un lado al lado del Sol y alineadas con Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno, situados al otro lado de nuestra estrella. Durante este alineamiento, el casquete polar de la Antártida de 3 millas de espesor, podría deslizarse hacia los océanos y provocar un desastre global. Los astrónomos están de acuerdo en que este alineamiento planetario es un hecho, pero discrepan sobre las consecuencias y en particular acerca de los vaticinios de Noone. La opinión generalizada es que el planeta sufrirá una especie de "tirón electromagnético que sin embargo no tendrá las características catastróficas auguradas por el escritor a pesar de todo Richard Noone insiste en que ese tirón será en realidad una sacudida, que liberen varios trillones de toneladas de hielo Antártico.
cambio en la geografía del planeta
El desplazamiento de los casquetes polares y la corteza terrestre
El casquete polar tiene el mismo tamaño que Estado Unidos y parte de Canadá y descansa sobre una plataforma terrestre cuya consistencia se semejaría a la de la pasta de dientes. Noone expone en su libro lo que considera evidencias de la periodicidad de este acontecimiento y parece ser que el anterior tuvo lugar hace unos 10,000 años. Entre las distintas catástrofes que se produjeron entonces cita, como ejemplo, la espectacular inundación que afecto a la meseta de Giza, en Egipto, cuyas consecuencias, en su opinión son visibles en la erosión causada por el agua en la base de la Esfinge. En los últimos treinta años se han recogido nuevos datos que algunos interpretan como un cambio en la corteza terrestre. Hasta la fecha, sin embargo las publicaciones especializadas acentúan el concepto de movimientos continentales, es decir, que cada uno de los continentes se aproximan y se distancia simultáneamente de los otros a causa de las corrientes del interior de la Tierra. Charles H. Hapgood, en cuyas teorías se baso Noone, señala en su libro "El Desplazamiento de la Corteza de la Tierra", que la teoría del movimiento continental presenta problemas únicamente solucionable si se acepta que toda la corteza externa de la Tierra se desplaza periódicamente, ocasionando un cambio en el eje del planeta. Hapgood ofrece un estudio de fenómenos climatológicos acaecidos en los últimos 100,000 años, fechados por el método del carbono 14, en el que se pueden distinguir tres cambios de las posiciones relativas de los polos en ese período.
El último de esos cambios lo sitúa hacia el 8,000 A. C. Para entender mejor como se mueve la corteza terrestre hay que tener en cuenta algunos factores básicos, en primer lugar esta es una capa relativamente delgada (de entre 10 y 50 millas) . Segundo, esta capa esta formada por roca cristalina y rígida con fracturas en muchas zonas, fallas de San Andrés, Breward y Motagua por ejemplo y no es muy consistente. Tercero, debajo de la corteza terrestre hay una débil capa que no puede cristalizarse debido a las altas temperaturas y la presión a esta profundidad hace que la roca sea muy plástica, cediendo en muchos casos por el aumento de la presión y comportándose como brea caliente. Ahora bien si se aplica una fuerza horizontal suave y continua sobre la corteza de la Tierra, se sabe que esta se desplaza sobre la capa inferior plástica. Este desplazamiento no tiene nada que ver con los movimientos de los continentes, como explica Hapgood en su libro:
"Veamos las consecuencias de un desplazamiento de toda la corteza de la Tierra. En primer lugar, habrá cambios de latitud y diferentes lugares del planeta variaran sus distancia en relación con el Ecuador. Algunos se desplazaran hacia el sur y los diametralmente opuestos hacia el norte. Naturalmente, los cambios climatológicos serán de envergadura proporcional a los cambios de latitud; aquellas zonas del planeta que se acerquen al Ecuador experimentarán aumentos de temperatura mientras las que se alejen, se enfriarán".
MAREMOTOS AZOTARÁN LAS COSTAS
Noone también explica los efectos provocados por la sacudida del 5 de Mayo del 2000 y la precipitación en el océano del casquete polar Antártico.
"Esta ingente masa de hielo se dirigirá hacia el Ecuador formando una gigantesca ola de destrucción de miles de metros de altura. Este mismo proceso se estará repitiendo desde el Polo Norte en dirección sur. Al mismo tiempo, se producirán gran cantidad de erupciones volcánicas, maremotos que inundarán de golpe muchos países, huracanes de una virulencia jamás conocida y una serie de terremotos que podrían superara los máximos de la escala de Richter. Por otra parte, las centrales nucleares y las plantas químicas que sufran el implacable avance de estos desplazamientos liberaran cantidades enormes de radioactividad y contaminación, creando en el planeta "Zonas muertas" de una magnitud colosal".
Hapgood considera que solo quedaran unos pocos supervivientes en dos lugares del planeta que el llama "puntos de giro". Según manifiesta Eklal Kueshana en su obra " La Ultima Frontera", 

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